Volviendo a Nuestro Primer Amor

¡Hola amig@s! Bienvenidos de nuevo a este blog, el día de hoy vamos a ser un poco prácticos para que podamos compartir lo que Dios ha puesto en nuestro corazón en este día. Para ello de pediré que hagas tres cosas:

• Piensa en cuanto te ama Dios.
• Piensa en tus mayores sueños y anhelos.
• Pídele al Espíritu Santo que te hable hoy.

Hecho esto, le pido a Dios que te hable el día de hoy Sabes amig@, hay muchos afanes en esta vida, muchos sueños que podemos alcanzar, metas o cosas que queremos hacer que a veces nos olvidamos lo más importante: ÉL. Una vez más te hablaré lo que Dios hablo a mi vida y espero te sirva. Cuando en serio hay algo que quieres o amas lo abrazas y se convierte en tu todo, llámese trabajo, escuela, un novio o novia, o un sueño (cosas que NO son malas), pero el problema surge cuando ocupan el lugar de Dios. La Biblia lo dice en Mateo 22:37,

“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.”

Fijémonos bien en lo que Jesús dice: con todo tu corazón, tu alma y mente. Quiero que seas realmente sincero contigo ¿Lo estás haciendo así? Si soy honesto, hace poco no lo estaba haciendo así, y no quisiera que cometieras ese mismo error de no amarlo como solo Él es digno.  Soñamos tantas cosas que nos olvidamos que si todo lo rendimos a Dios, él lo dará a su tiempo conforme a su voluntad. Jesús ya no era mi todo, no le daba los buenos días al despertar, no platicaba con él, no leía su Palabra. Uno mismo se puede dar cuenta que Dios no es el primero en su corazón.  “Cuánto más tiempo pasas en otras cosas que en estar con él” me habló un día  y fue tan real. Apocalipsis 2:5 dice,

“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.”

Esta frase no es un reclamo, es más un dolor del corazón de Dios y lo sentí tan personal, porque sabía que me había enfocado más en lo que yo quería, mis sueños y anhelos. Como dije no está mal, pero si conoces a Dios y lo amas a él, tu estarás dispuesto a darlo todo en amor por él. Dios es el que más quiere que tengas un buen matrimonio, Él es que anhela cumplas los sueños él que puso en tu corazón. Él quiere bendecirte, yo creo eso.

Si no estás pasando por esto enserio me alegro, pero si es tu caso dime: ¿Qué es lo que está ocupando el lugar de Dios en tu corazón?, ¿Lo amas más que a tus propios sueños? ¿Tal vez es un pecado lo que te impide? Quiero decirte que este tiempo fue diseñado para restaurar tu relación con Dios, te contare una historia. Hubo un tiempo donde Israel se encontraba en su peor temporada, cometiendo atrocidades, y aun así Dios le mostró su amor y misericordia. En el libro de Oseas capítulo once Dios hablaba con su corazón a su amado pueblo:

“Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo. Cuanto más yo los llamaba, tanto más se alejaban de mí; a los baales sacrificaban, y a los ídolos ofrecían sahumerios. Yo con todo eso enseñaba a andar al mismo Efraín, tomándole de los brazos; y no conoció que yo le cuidaba.”

Imagínate la escena, donde el pueblo de Israel estaba en una pésima condición y Dios aun le hablaba y quería volver sus corazones a Él. Por eso te digo, amigo, no importa el pecado mientras estés dispuesto arrepentirte y a comenzar de nuevo tu relación con Dios. O si apenas vas a iniciar tu relación con él, sus brazos abiertos están listos para recibirte. La misericordia de Dios es tan grande que nada puede separarnos de su amor. Romanos 8:39 dice,

“ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.”

NADA.  A donde dirijas tu mirada, ahí estará su amor, Restaura el primer mandamiento en este tiempo, que Él vuelva a ser tu primer amor, y lo demás Él lo añadirá. Es tan hermoso cómo el Espíritu Santo nos persigue con su paciencia y amor. Él ha estado en cada momento importante con  tanta ternura. Cuando Jesús fue bautizado, Él estuvo ahí. El Espíritu Santo estuvo en todos los hechos importantes de la historia, y está ahora con nosotros. Cuando Él tome el primer lugar en el corazón de sus hijos y sea su todo, entonces comenzarán a suceder milagros y prodigios en las iglesias. Habrá muchas personas salvas porque el Espíritu Santo será la persona más importante para nosotros. Él te anhela más que todo en este tiempo, pero ¿tú lo amas a él con toda tu vida? Cuando pierdas tu vida a causa de él, lo ganaras a Él. Tu vida involucra tus sueños, tus anhelos, tus deseos, tus padres, tus hermanos, tus amigos, tu tiempo, tu espacio, tu todo. Como dice Mateo 16:25,

“Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará”

Que en este tiempo salgas más apasionado y enamorado de Dios, que Él sea el amor de tu vida para que puedas mostrar a Jesús en todas partes y manifestar su amor en dondequiera que vas. Recuerda que el Espíritu ira contigo siempre hasta el fin. Él te amó, te ama, y te amará siempre. Jeremías 31:3 dice,

“Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.”